El único (último) tango
Eran las 4 de la tarde, Lusail se preparaba para un choque que iba más allá de una Copa del Mundo. Se hacía raro no andar con chanclas y helados, con el olor del salitre todavía en la piel como aquel 2014 en la playa del Palmar, cuando Maracaná le daba a Mario Götze un … Leer más