Cuantas palabras, momentos, lugares y sensaciones me traerá la palabra Amigo…no podría definir la amistad como algo concreto, pero si como algo necesario en cualquiera de nosotros, soy de los que piensan que no se encontrará la felicidad hasta que no se encuentre antes la amistad.
Decir amigo me recuerda, a tardes de invierno contándonos las historias, a paseos cálidos de verano cuando el sol flameaba travieso por las callejas de nuestra humilde ciudad, a noches sabáticas delante de un televisor, en vela…disfrutando, riendo…forjando más si cabe nuestra amistad, a viajes a lugares donde nos llevara la corriente, a whisky, a risas, a noches de ligues…
Me sería imposible contar los momentos juntos tan buenos a tu lado, han sido miles, que incluso no los recuerdo todos…pero no importa…me queda una agradable sensacion, un hormigueo por mi corazón cada vez que te veo…que sabe que momentos pasados han sido buenos, que sabe que los voleria a repetir con los ojos cerrados, que me sentiría arropado en cada decisión que tome, y si no estuvieras de acuerdo, sé que siempre nos respetaríamos…jamás ha habido una palabra más alta que otra, nunca he tenido que arrepentirme de nada que hayamos echo.
Ayer sentado en un viejo lugar, añoré como el tiempo se nos echaba encima…nos conocimos siendo unos críos…ahora somos ya hombres, cada uno forjando su vida, su destino…pero por muy lejos que vayas, por muchos océanos que crucemos…no habrá horizonte capaz de hacerme olvidar, que una vez tuve un amigo, un hermano y que pase lo que pase…iremos a muerte el uno como el otro.
No se si existirá el amor verdadero, lo que si os puedo asegurar, es que existe la amistad sincera, verdadera…y eterna.