El sentir de una vida

Cómo es posible que unos trovadores rebeldes del verso como nosotros, contando nuestros ires y venires, en un insignificante blog, podámos hacer estremecer, hacer llorar, e incluso hasta tal punto que el lector se impregne de nuestra melancolía por los 4 costados y se sienta héroe de un mundo de letras, se sienta el bohemio con voz rota que va buscando y mendigando el querer de una negra de ojos verdes como el mar, que la dejó en una tarde de verano.

Empezé en esto gracias a mi amigo Milio, decidí que a parte de vivir mi vida, con mis experiencias, debía dejar constancia de ella, como si tal manuscrito fuera, quería hacer llegar al resto que me gustaba soñar, y quizás sobre estas líneas muchos lo hayan echo, me hayan acompañado en este camino, identificandose con cada palabra que sale de mi alma, y es plasmada aquí, me enorgullece saber, que este blog, echo sin ninguna pretensión pero con toda la ilusión del mundo, es capaz de transmitir unos sentimientos, que jamás, podemos ver en la vida cotidiana.

-[Mis ojos tristes quizás me delatan]

L@s que me ven más allá de los ojos, me dicen que tengo cara de poeta, se atreven a decir que con todas las letras, no quiero ser aquel poeta, que ve a su gloria, y no a su pueblo, no pretendo conquistar a nadie, y mi ropa sucia siempre la he mantenido alejado de las malas marías, no tengo más princesa que mi niña…y si quieres saber por quien suspira el corazón mío marinera…

!Hunde un cuchillo hasta el sentío!

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