Explosión de ideas

Celos que separan un camino, hecho de espinos y blancos senderos, arboles que no gritan el susurro del frio otoño, de la tarde mas gelida, abanicos escondidos por los regazos del frio, sonrisas tenues, gritos sobre la hiedra donde se forjaron amores por la luna llena, arena donde se arrancan por soleares las niñas mas bonitas de mi ciudad, cuerpos abatidos al abandono de los seres inertes, la soledad que cobra vida, la melancolia que ahoga, aquel barco velero que no encuentra su norte, la niebla que se puede cortar con cuchillo, el ronco sonido del ruiseñor.

Quizas sea la vida la que nos trate así, quizas seamos nosotros quien tengamos el timón de la libertad, quizas seamos nosotros quien lo enterremos y nos aboquemos a causas perdidas, a rumbos desconocidos, a islas fantasmas, a oasis en desiertos, quizas movamos los huracanes de los celos cuando bailamos al mismo son de la musica, al mismo son del que creemos es nuestra libertad…o quizas nuestra condena.

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