Trazando el rumbo

Llegaba el momento de alzarse sobre la colina, contemplar el horizonte, y tragar saliva…porque hoy de nuevo decidió que era hora de volver a desplegar sus alas, desde hace ya tiempo tuvo ese ligero cosquilleo que le hicieron saber que su vida daría un vuelco radical, era la época de cambios y de nuevos rumbos y en todos los aspectos.

Cerró los ojos, y antes de aquel salto recordó tantísimos momentos vividos, tantísimas alegrías y fracasos, se acordó de muchísimo, de la fuerza de voluntad, de levantarse cuando no había nada por lo que luchar, de cuando nadie apostaba por él, o de quizás conseguir el amor más perseguido, aquel con el que soñó tantísimo y que quizás tuviera tan cerca y a la vez tan lejos…aún no lo sabía.

Pero sí sabía que había llegado el momento…que era el momento señalado y la hora precisa, el destino le decía ‘ahora’, y él supo interpretarlo como cuando más corage había que demostrarle al mundo, era el momento de desplegar aquellas maravillosas alas, y lanzarse al horizonte dejando atrás un destello en forma de arcoiris, para que todo el universo contemplara su color, para que a su paso salpicara de color aquellos corazones grises y tristes, para que con su bohemio vuelo muchísimos más se lanzaran sin temor, en aquel romántico pensamiento de no perder nada y ganar mucho…

Y que cuando al final del trayecto, volvamos a poner nuestros pies en el suelo, nos sintamos orgullosos de haber luchado, de no habernos rendido, de no arrepentirnos de decir tantísimas cosas que creímos callar, pero que nuestro corazón deseaba y rebosaba decir, de tantísimas risas que esbozamos en cualquier madrugada, sin querer…queriendo, y aún así independientemente del resultado de nuestro vuelo, podamos decir, que fuímos nosotros mismos, que nos recordarán tal y como fuimos.

Y que en ojalá aquella colina, algún día, tu también sacarás tus alas, y en tu tremenda alegría emprenderás el rumbo que una vez seguí yo, por tí, por mí… por tantísimos cometas en forma de besos que algun día estallarán frente al rincón del corazón donde pensamos algún día, cuando fué cuando empezamos a recordarnos por siempre…

‘Hoy serás un héroe, abraza a la muerte, porque tu nombre ya nunca morirá’

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