Ahínco
Quizás un día te levantas y tu único deseo es tener alas, estrenar tu nueva libertad con un vuelo sublime, suave como el más sedoso terciopelo a media mañana, sosegado y sin más ruido que el silbido del viento a tu paso sintiéndote enorme, gigante… Y ese día te alzarías grande a la tierra, para … Leer más